Amenorrea secundaria: Alteraciones del ciclo menstrual según la medicina germánica

La amenorrea o la ausencia de menstruación, desde su sentido biológico como herramienta de la naturaleza, puede ser analizada a través de la Nueva Medicina Germánica. En este artículo no analizaremos efectos adversos o secundarios a tratamientos quirúrgicos de la medicina convencional, fármacos, hormonoterapia o quimioterapia por ser las responsables de la amenorrea secundaria, en forma directa.

Cuando nos referimos a una amenorrea secundaria (como programa de la naturaleza) hacemos referencia a la interrupción involuntaria de la menstruación (durante el tiempo equivalente a 2 ciclos normales) en una mujer que ha menstruado previamente (o sea, que ya ha tenido su primera menstruación o menarca).
Cabe hacer la aclaración que la causa más frecuente de amenorrea secundaria es el embarazo. Siempre se debe tener presente esta opción en mujeres activas sexualmente. Otra causa natural de amenorrea secundaria es la menopausia o final del ciclo reproductivo femenino.

En los casos de mujeres que nunca hayan tenido su primera menstruación, estaremos hablando de amenorrea primaria.

Según la NMG, las causas naturales de la amenorrea secundaria pueden ser:

• por activación del relé ectodérmico del cuello del útero y de la íntima de las venas coronarias (se necesita de un solo conflicto biológico activo en mujeres diestras o dos conflictos biológicos activos en mujeres zurdas) por frustración sexual/vincular (incapacidad de formar pareja).
• por un conflicto de pérdida relacional profunda con necrosis de los ovarios por activación del relé endodérmico correspondiente en tallo cerebral, con expresión (amenorrea) en fase de solución.

En ambos casos se produce la interrupción de los ciclos menstruales. Sin embargo, existen diferencias entre estos programas, lo cual es lógico por la activación de diferentes capas embrionarias, con diferentes comportamientos particulares, según la 3º ley biológica. Un programa pertenece al ectodermo y el otro al endodermo.

Amenorrea por conflicto ectodérmico

Comenzamos por el programa biológico, especial y significativo (SBS) ectodérmico, el cual se activa por un conflicto de frustración sexual y expresa su sentido biológico en fase de CA. Así es la descripción clásica de la temática del conflicto, sin embargo propongo ampliar el concepto de “sexual” a “vincular” ya que, según mi experiencia e investigación, el concepto de pareja es mucho más amplio que el simple hecho de mantener relaciones sexuales.

En la naturaleza, la hembra forma un equipo con el macho, cada uno tiene sus funciones específicas que cumplir y ambos garantizan al otro su cumplimiento, de esta manera se trabaja en conjunto optimizando recursos, cada quien con sus responsabilidades.

En el caso de las mujeres inmersas en el contexto social, la frustración sexual hace referencia a la incapacidad de encontrar el “macho”/hombre capaz de garantizar la reproducción, como así también de asegurar el territorio, como así también de garantizar el bienestar de su pareja (en todos los sentidos, incluso durante las relaciones sexuales) y de sus hijos (crías o descendencia). Cuando la mujer no encuentra estos elementos en un hombre con el cual tiene un vínculo o directamente no logra vincularse , se activa el conflicto de frustración (por eso propongo el término vincular, al no poder establecer el vínculo con su opuesto). Recordemos que en caso de una mujer diestra es necesario un sólo conflicto pero en casos de mujeres zurdas, para que se active el relé de cuello uterino es necesaria la presencia de una constelación con doble conflicto de frustración sexual/vincular.

Si sucede la activación del relé se inicia la interrupción de los ciclos menstruales junto con el comienzo de un proceso ulcerativo en el cuello del útero, siempre y cuando se trate de una mujer en edad fértil. En caso de mujer en estado de menopausia, se activará el conflicto de territorio vivido de un “modo masculino”, generando la úlcera pero en las arterias coronarias (mujeres diestras un solo conflicto y las mujeres zurdas requieren dos conflictos para esta activación).

El sentido biológico clásico es ulcerar el cuello uterino para mejorar la posibilidad de procrear, pero también es super lógico pensar también que la mujer fértil pone en pausa el modo reproductivo, porque sería un grave error biológico reproducirse cuando considera que la pareja no es la adecuada.

Una vez solucionado el conflicto, cuando la mujer logra establecer una relación estable y confiable, todo vuelve al estado previo de normalidad con retorno de ciclos menstruales regulares y fertilidad aún con procesos biológicos en las últimas fases de solución o PCL-B (según la medicina convencional se diagnostican como HPV o carcinomas, por ejemplo).

Virus del Papiloma Humano o HPV

Cabe aclarar que habiendo solucionado el conflicto biológico, la mujer puede ser diagnosticada con VPH o virus papiloma humano, especialmente si se realiza controles ginecológicos de rutina. Dado que se trata de un programa de ectodermo es esperable la aparición de “este virus” durante la fase de restauración o PCL (recordar que los programas de ectodermo utilizan los virus, los cuales considero como formaciones creadas por el mismo individuo y que actúan como mensajeros y/o proveedores de materiales para completar la reparación celular). Todos deberían saber que estos cambios en la mucosa vaginal, como también la detección de VPH o carcinomas in situ, son autolimitados (se resuelven por sí solos), siempre y cuando la persona no se recaiga en el conflicto, como lo explican las 5 leyes biológicas.

Amenorrea por conflicto endodérmico

El otro caso vinculado con la amenorrea secundaria se trata de un programa de endodermo (específicamente de las células germinales en el ovario).
El conflicto descrito para estos programas es la “pérdida relacional profunda” y, en una minoría de los casos, está vinculado a un conflicto semi-genital desagradable (son aprox. el 3-5 % de los casos totales).
En estos casos el sentido biológico del programa es aumentar la producción de estrógenos, con el objetivo de hacerse más femenina, para atraer más compañeros.

La pérdida relacional profunda es una pérdida de contacto con algún miembro muy cercano del clan, pudiendo ser un familiar, hijos, mascotas o una pareja. Esta pérdida por lo general está relacionada con la muerte de un ser querido (desaparición del plano físico) pero también se puede considerar la separación vincular o relacional.

El conflicto semi-genital desagradable es una idea o ilusión en relación con un miembro cercano del clan, del cual se sospecha o comprueba alguna relación sexual considerada por la persona en conflicto como cuestionable, o desagradable. Un ejemplo podría ser que una hija descubre a su padre, quien aún estando separado y libre, tiene una relación sentimental con una mujer mucho más joven que él y de malos hábitos. Se denomina semi-genital porque está implícita alguna actividad sexual aunque no está involucrada en forma directa.

Como en la mayoría de los casos que se activa el endodermo, la sintomatología se expresa durante la fase de solución. En muchas mujeres, estos programas de ovario, realizan la reparación biológica sin grandes alteraciones más allá del retraso menstrual y algunos suelen ser imperceptibles. Sin embargo, en los casos de masa conflictual muy grande e intensa, podría expresarse mediante un cáncer de ovario. Otro hecho a tener en cuenta en relación con la formación de un carcinoma ovárico es que durante la fase PCL, se producirá reparación del tejido mediante el uso de bacterias, en caso de estar disponibles según la 4º ley biológica.

La presencia de bacterias en ovarios o cavidad pelviana es frecuentemente diagnosticada como EPI (enfermedad inflamatoria pelviana) por la medicina convencional. Ahora sabemos que estas infecciones no son producto de contagios o enfermedades de transmisión sexual, ahora podemos afirmar que son parte de la reparación biológica de un programa endodérmico, con un sentido biológico determinado y comportamiento orgánico predecible.

Por último, cabe aclarar que una vez resuelto el conflicto, se inicia la reparación biológica la cual puede durar hasta 9 meses hasta completar el ciclo.

La presencia, en diversos estudios, de imágenes compatibles con ovarios poliquísticos, adherencias o quistes ováricos nos hace sospechar que esa mujer ha pasado por programas biológicos, significativos y especiales de ovario en el transcurso de su vida pasada o se encuentra en recaídas continuas en el conflicto..

Como conclusión puedo decir que cada mujer debe analizar su historia personal y descubrir qué tipo de conflicto biológico le corresponde a su amenorrea secundaria. Reconocer una pérdida puede ser fácil o difícil, muchas veces no sentimos una pérdida como tan importante pero sin embargo, el cuerpo y la psique se expresan a través de la adaptación biológica para que nos ocupemos de todas y cada una de nuestras cuestiones pendientes.

Por otro lado, también es difícil conseguir establecer una relación vincular plena y colaborativa, especialmente en esta sociedad superficial pero sugiero trabajar en el ámbito personal, tomar las decisiones que consideren correctas siendo totalmente libres y estar preparadas para dar y recibir lo mejor en la próxima relación.