La Importancia del “YO” en la Nueva Medicina Germánica
Explorando la Lateralidad Personal: La Importancia del “YO” en la Nueva Medicina Germánica
La Nueva Medicina Germánica (NMG) proporciona una perspectiva única integrando conceptos como la lateralidad biológica para comprender sobre cómo los conflictos biológicos se manifiestan físicamente en el cuerpo humano. Dentro de este marco teórico, emerge un concepto fundamental que propongo denominar “lateralidad personal”, que explora la respuesta biológica en relación a conflictos con uno mismo, porque sabemos donde se expresan los programas relacionados con nuestras madres, abuelas, hijos, parejas, amigos, etc. pero aún no nos pusimos a pensar donde afectan los conflictos vinculados consigo mismo.
Antes de explorar la “lateralidad personal” (que refiere al lugar que ocuparía mi propio ser si debiera expresarse biológicamente, mediante un SBS), es crucial comprender el concepto de la lateralidad biológica en la NMG. Según el Dr. Ryke Geerd Hamer, el cuerpo humano está dividido en lados par e impar, cada uno asociado con diferentes tipos de relaciones y su manifestación durante los conflictos biológicos:
Lado Par: Este lado está relacionado con conflictos biológicos que involucran a pares, parejas, padre y abuelo. Incluye cualquier relación donde haya una conexión de compañerismo, apoyo mutuo o roles simétricos. En caso de personas diestras se verá afectado el lado derecho del cuerpo, y viceversa en personas zurdas.
Lado Cruzado: Este lado se asocia a conflictos biológicos relacionados con la madre, los hijos, la abuela y cualquier ser percibido como un hijo o dependiente. En caso de personas diestras se verá afectado el lado izquierdo del cuerpo, y viceversa en personas zurdas.
Introducción a la Lateralidad del YO
La “lateralidad personal” se centra en la relación íntima y personal que cada individuo tiene consigo mismo dentro del marco de la NMG. Este concepto amplía la comprensión de cómo los conflictos biológicos, exclusivamente personales, pueden manifestarse físicamente. No intento cambiar ni modificar ningún concepto sobre lateralidad biológica, más bien es mi deseo aportar una comprensión más amplia sobre el impacto de los programas, brindando una herramienta extra de análisis que nos permitirá comprender y explicar gran cantidad de adaptaciones corporales. Haciendo esta aclaración, me permito hablar sobre los ejes verticales y horizontales.
Ejes Verticales y Horizontales
El concepto de lateralidad biológica se extiende más allá de la dicotomía simple entre lado par y cruzado. Me permito introducir los conceptos de ejes verticales y horizontales, que añaden una dimensión adicional al entendimiento de cómo los conflictos biológicos se reflejan en el cuerpo humano (lateralidad). Aquí les dejo una imagen que intenta representar los conceptos a desarrollar:
Eje Horizontal (corresponde al lado PAR): Este eje se relaciona con conflictos biológicos que implican relaciones horizontales, con todos aquellos reconocidos como pares o similares, incluyen parejas, compañeros de trabajo, figuras de autoridad (padre y abuelo) o incluso temas territoriales. En personas diestras, estos conflictos pueden afectar el lado derecho del cuerpo según la NMG.
Eje Vertical (corresponde al lado CRUZADO): Este eje se centra en conflictos biológicos relacionados con figuras significativas en términos evolutivos, como la madre, los hijos y la abuela. Estos conflictos reflejan relaciones personales que afectan directamente a la supervivencia. Son relaciones fundamentales en términos evolutivos y emocionales las cuales, difícilmente pueden ser suplantadas por un par. Según Robert Guineé, son relaciones de “importancia primordial en todos los sentidos”.
Hablando específicamente de la “lateralidad personal”, considero que todos los conflictos biológicos relacionados exclusivamente con uno mismo deberían manifestarse en el lado “importante” del ser, es decir, en el eje vertical (lado cruzado). Cada individuo experimenta una relación única consigo mismo, que trasciende las dinámicas de pareja y otros vínculos horizontales, es una percepción sobre nosotros mismos que nos permite diferenciarnos como individuos.
Comprendemos que la madre, los hijos y la abuela son personas indispensables en la cadena de la vida y por este motivo las ubicamos diferenciadamente de todos los otros seres.
Por lo tanto, considero que todos los conflictos biológicos relacionados con uno mismo (la “lateralidad personal”) deberían manifestarse del lado importante del ser, del lado vertical.
Porque ahora podemos comprender al “yo” como el engranaje medio y necesario entre la madre y el hijo (completando ese eje vertical), porque además nos sentimos diferentes y únicos, porque tenemos reservado el lado importante, también, para nosotros mismos.
Esta perspectiva reconoce la singularidad del yo y cómo los conflictos, encuentran su expresión física en el lado cruzado del cuerpo, según mi interpretación basado en la Nueva Medicina Germánica.
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